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Las microapuestas permiten realizar apuestas en vivo sobre momentos específicos de un partido, como el próximo lanzamiento o un tiro libre, en lugar de sobre el resultado general. La preocupación por los riesgos de este tipo de apuestas ha aumentado junto con su popularidad en Estados Unidos. Por ello, el asambleísta Dan Hutchison de Nueva Jersey ha propuesto el Proyecto de Ley A5971, que prohibiría las microapuestas en el estado. El proyecto de ley establece sanciones para los operadores que sigan ofreciendo estas apuestas, definiéndolas como apuestas sobre jugadas o actividades específicas durante un partido.
Hutchison argumenta que las microapuestas fomentan el juego impulsivo debido al rápido ritmo de apuestas realizadas durante los partidos en vivo. Cita un aumento significativo del 277% en las llamadas a las líneas de ayuda para problemas de adicción al juego desde que se legalizaron las apuestas deportivas en Nueva Jersey, como señal de la creciente preocupación.
Hutchison afirmó lo siguiente: “El ritmo de las microapuestas está diseñado para que la gente siga apostando, haciendo apuestas impulsivas una tras otra sin apenas tiempo para pensar. Este proyecto de ley es una medida sensata para frenar ese ciclo y proteger a las personas de los daños financieros y emocionales que pueden derivar de las apuestas excesivas”.
Algunos expertos afirman que, al proporcionar desencadenantes psicológicos recurrentes, la arquitectura de estos sistemas fomenta la adicción. Además, los jugadores más jóvenes podrían sentirse atraídos por el formato debido a su atractivo visual y facilidad de uso, lo que genera preocupación sobre la exposición temprana al juego.
Las microapuestas se centran en acciones específicas del juego, como un solo lanzamiento o jugada, que se consideran más susceptibles a la manipulación que los resultados de un partido completo. Esto ha suscitado preocupación por su posible impacto en la integridad del deporte profesional. Por ejemplo, la Major League Baseball (MLB) ha investigado a jugadores por comportamientos posiblemente vinculados a patrones de microapuestas. El comisionado de la MLB, Rob Manfred, ha descrito ciertos tipos de estas apuestas como particularmente vulnerables e innecesarias.
Además, en su comunicado, Hutchison afirmó: “Con esta ley no pretendemos prohibir las apuestas deportivas. Se trata de establecer límites para garantizar que se realicen de forma responsable. Al prohibir las microapuestas, estaríamos tomando una postura clara contra las prácticas predatorias que empujan a las personas a hábitos de juego irresponsables”.
Nueva Jersey ha introducido varias medidas para regular la industria del juego. Estas incluyen aumentar la tasa impositiva sobre las apuestas en línea al 19,75%, prohibir los 바카라s de sorteos que operaban en zonas grises de legalidad y prohibir las colaboraciones entre universidades y casas de apuestas deportivas para limitar la exposición de los estudiantes a las promociones de juegos.
Algunos operadores han expresado su preocupación por la posible prohibición de las microapuestas. Por ejemplo, DraftKings adquirió la tecnología de microapuestas de Simplebet por unos 80 millones de dólares. Si la prohibición entra en vigor, estas inversiones en un sector vital podrían perder valor. Las empresas podrían reconsiderar sus planes como resultado de la recomendación, lo que podría llevar a una reducción de operaciones o a un cambio de enfoque.
El director ejecutivo del Consejo sobre Juego Compulsivo de Nueva Jersey, Luis Del Orbe, ha respaldado la propuesta de prohibir las microapuestas, calificándola de medida esencial para la seguridad pública. El Consejo ha desempeñado un papel clave en la recopilación de datos, la concienciación y la promoción de prácticas de juego responsable. Los expertos en salud pública argumentan que el objetivo no es restringir la libertad personal, sino garantizar la seguridad del consumidor en un sistema que puede explotar vulnerabilidades conductuales.
Luis Del Orbe afirmó lo siguiente: “La evidencia subraya que las microapuestas pueden acelerar el camino hacia el juego problemático, especialmente entre poblaciones vulnerables como los jóvenes y las personas con antecedentes de juego compulsivo”.
Y agregó: “Al eliminar las microapuestas, esta legislación daría un paso esencial para proteger a los ciudadanos de los efectos nocivos de las prácticas de juego imprudentes”.
Dado que Nueva Jersey fue el primer estado en legalizar las apuestas deportivas, otros estados siguen de cerca sus acciones. La prohibición de las microapuestas podría afectar dichas leyes en otras jurisdicciones. Los ingresos estatales podrían verse afectados por la prohibición, pero quienes la promueven argumentan que los beneficios a largo plazo para la salud pública superan las ganancias financieras inmediatas.