Sorteos en la mira: Blazesoft enfrenta una demanda colectiva y los estados se movilizan

David Gravel
Escrito por David Gravel
Traducido por Milagros Codo

Lo que parece un ë°”ì¹´ë¼ de apuestas inofensivo puede ser todo lo contrario. En Nueva York, esa ilusi¨®n est¨¢ ahora en el punto de mira.

El operador de sorteos en l¨ªnea Blazesoft, conocido por sus plataformas Fortune Coins, Zula Casino y Sportzino, se encuentra en el centro de una demanda colectiva. El caso, presentado en el Distrito Sur de Nueva York, acusa a la empresa con sede en Ontario de operar un sistema de apuestas ilegales camuflado en una experiencia de sorteos gratuitos.

La demanda afirma que los sorteos son un ë°”ì¹´ë¼ apenas disimulado

Autumn Boatner, residente de Nueva York, afirma haber perdido m¨¢s de 50 d¨®lares en juegos de Blazesoft que se promocionaban como gratuitos y legales. Su equipo legal argumenta que el modelo de doble moneda (monedas Gold para jugar y monedas Sweeps que se canjean por efectivo) es una fachada para las apuestas con dinero real.

En la demanda colectiva presentada en el Distrito Sur de Nueva York, el equipo legal de Boatner llama al sistema ¡°una trampa depredadora¡±. El documento alega que Blazesoft incita a los jugadores a gastar en paquetes de monedas Gold, que incluyen monedas Sweeps como ¡°bonificaciones¡±. Estas bonificaciones son la ¨²nica v¨ªa para obtener dinero real. Seg¨²n la presentaci¨®n legal, esto lo convierte en una apuesta en todo menos en el nombre.

En la presentaci¨®n de la demanda colectiva, el equipo legal de Boatner tambi¨¦n describi¨® los criterios de canje como ¡°intencionadamente opacos¡±, argumentando que los umbrales de retiro est¨¢n dise?ados para confundir a los jugadores y retrasar los retiros.

Peor a¨²n, la denuncia afirma que los menores de edad pueden acceder a los juegos. Si bien la ley de Nueva York establece los 21 a?os como edad legal para jugar, Blazesoft permite jugar a usuarios mayores de 18 a?os.

La empresa afirma operar desde Canad¨¢, pero sus marcas de 바카ë¼s incluyen domicilios comerciales en Delaware. La demanda las describe como “empresas ficticias” sin empleados ni presencia f¨ªsica.

Un pasado que se repite una y otra vez

Esta no es la primera vez que los reguladores estadounidenses se enfrentan a este modelo. A mediados de la d¨¦cada de 2000, los caf¨¦s de sorteos en l¨ªnea se extendieron por los centros comerciales estadounidenses. Estos negocios ofrec¨ªan acceso a internet y, con ¨¦l, participaciones en sorteos que se parec¨ªan sospechosamente a m¨¢quinas tragamonedas.

Utilizaban las mismas leyes que impulsaban campa?as promocionales como el Monopoly de McDonald’s. Pero a diferencia de esos concursos, las cafeter¨ªas estaban abiertas las 24 horas y depend¨ªan de juegos simulados para impulsar el gasto de dinero real.

?Suena conocido?

Estados como Ohio y California finalmente prohibieron los caf¨¦s por completo. La Asociaci¨®n Estadounidense del Juego (American Gaming Association, AGA) ahora establece una l¨ªnea directa entre esos caf¨¦s y los sitios web de sorteos actuales.

¡°No hay diferencias en muchos aspectos¡±, dijo Tres York, vicepresidente de la divisi¨®n de relaciones con el gobierno estatal de la AGA. ¡°El modelo de negocio es el mismo. Uno usaba tiendas f¨ªsicas. El otro, sitios web¡±.

En Blazesoft no est¨¢n solos. El modelo de sorteos est¨¢ bajo asedio desde m¨²ltiples ¨¢ngulos.

Stake.US se enfrenta a una demanda colectiva en Illinois por utilizar un sistema de doble moneda similar. En la demanda, alegan que la empresa, con el respaldo de celebridades, no deja en claro cu¨¢l es el l¨ªmite entre las apuestas y los juegos sociales. El mismo bufete tambi¨¦n present¨® una demanda en California y obtuvo una sentencia de 25 millones de d¨®lares en Washington contra High 5 Games.

Mientras tanto, una demanda presentada nuevamente en Nueva Jersey se dirige contra gigantes tecnol¨®gicos. Los demandantes alegan que Apple y Google facilitaron sorteos ilegales al distribuir aplicaciones como Chumba Casino y Luckyland. La demanda invoca la Ley RICO, generalmente reservada para el crimen organizado. Afirma que las plataformas se beneficiaron del procesamiento y la promoci¨®n de juegos ilegales.

En Carolina del Norte, un tribunal de apelaciones dictamin¨® que los quioscos que ofrec¨ªan videojuegos tipo sorteo infring¨ªan la ley estatal. ?La cuesti¨®n clave? Ganar se basaba en el azar, no en la habilidad.

Los legisladores estatales marcan un l¨ªmite

Los estados no esperan la direcci¨®n federal. En 2025, Nueva York present¨® dos proyectos de ley para prohibir por completo los 바카ë¼s de sorteos en l¨ªnea. Las leyes propuestas, S5935 y A6745, se aplicar¨ªan a operadores, proveedores, afiliados y procesadores de pagos. ¡°Estos sitios funcionan 24/7. No es una promoci¨®n, es un 바카뼡±, explic¨® el senador Joseph Addabbo Jr. a . Agreg¨® que muchas de estas plataformas tienen ¡°juegos muy coloridos a los cuales tienen acceso los menores de edad¡±. Las multas podr¨ªan alcanzar los 100.000 d¨®lares por infracci¨®n. La aplicaci¨®n de la ley recaer¨ªa en los reguladores del juego, la polic¨ªa y el Fiscal General.

Otros estados est¨¢n siguiendo el ejemplo. Connecticut ha prohibido los 바카ë¼s de sorteos. California, Pensilvania y Massachusetts tambi¨¦n han tomado medidas de cumplimiento. Pero no todos los esfuerzos han tenido ¨¦xito. El intento de Maryland de prohibir el modelo fracas¨® en su sesi¨®n de 2025.

La industria contraataca

Desde la Asociaci¨®n de Juegos Sociales y Promocionales (Social and Promotional Games Association, SPGA) argumentan que las nuevas leyes son excesivas. Advierten sobre posibles da?os no intencionados a las promociones genuinas.

¡°”Cuando la legislaci¨®n amenaza los beneficios cotidianos de las aerol¨ªneas, los hoteles y la cafeter¨ªa local, est¨¢ peligrosamente fuera de lugar”, dijo un vocero. .

Sin embargo, los cr¨ªticos argumentan que los sorteos reales son concursos gratuitos por tiempo limitado. Los 바카ë¼s de sorteos en l¨ªnea operan todo el a?o y requieren compra para jugar. Los reguladores han desestimado la afirmaci¨®n de que las monedas Sweeps sean realmente gratuitas. Como Tres York le dijo a Vixio Gambling Compliance, ¡°ning¨²n ¨®rgano regulador ha aceptado el argumento¡±.

El riesgo de ignorar la aplicaci¨®n de la ley

Para los operadores, las consecuencias ya no son hipot¨¦ticas. Los riesgos legales y regulatorios se acumulan.

Los estados pueden imponer multas elevadas, algunas de m¨¢s de 1.000 d¨®lares por infracci¨®n. En Nueva York, las infracciones bajo las leyes propuestas podr¨ªan alcanzar cifras de seis d¨ªgitos.

Tambi¨¦n se est¨¢n considerando cargos penales. En Florida, los operadores enfrentan delitos menores. En Connecticut, podr¨ªan enfrentar un a?o de c¨¢rcel por cada cargo. Las autoridades pueden emitir ¨®rdenes de cese y desistimiento, suspender licencias o revocar autorizaciones de juegos de azar. En un caso, Connecticut retir¨® una licencia de servicio debido a la actividad de sorteos.

Los operadores tambi¨¦n se arriesgan a demandas civiles y colectivas. Blazesoft se enfrenta ahora a precisamente eso, con una creciente base de demandantes en Nueva York. Los procesadores de pagos y sus afiliados podr¨ªan ser los siguientes. Las instituciones financieras se muestran cautelosas. WorldPay fue mencionado anteriormente en litigios. La exposici¨®n legal podr¨ªa provocar que bancos y procesadores abandonen el sector por completo.

Finalmente, existen consecuencias para la reputaci¨®n. Una prohibici¨®n estatal puede provocar la salida del mercado y da?os permanentes. Si las agencias federales intervienen bajo leyes como la Ley de Viajes, las consecuencias se agravan.

?Estallar¨¢ la burbuja?

El silencio de Blazesoft lo dice todo. Si bien la compa?¨ªa presume de tener 4 millones de usuarios en Norteam¨¦rica, su situaci¨®n legal est¨¢ en entredicho.

En todo Estados Unidos, crece una ola regulatoria. Desde las legislaturas estatales hasta los juzgados, el mensaje es simple: los modelos de sorteo de doble moneda podr¨ªan no funcionar.

En 2025, la situaci¨®n se pone dif¨ªcil. Los reguladores han dejado de hacer preguntas y han empezado a establecer l¨ªmites. Ya no preguntan si estas plataformas infringen las normas. Preguntan cu¨¢nto tiempo tardar¨¢n en cerrarlas.

Los 바카ë¼s con sorteos prometen a los jugadores un viaje gratis, pero pueden encaminarse directamente a un callej¨®n sin salida legal.

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