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Los pioneros del juego en l��nea, segunda parte: Ian Sherrington
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Intertops perdi�� la primera apuesta deportiva en l��nea, s��, pero hacer historia fue un premio consuelo razonable.
Corr��a el a?o 1994, e Ian Sherrington hab��a comenzado a experimentar con los primeros protocolos de Internet. ��Me fascinaban las redes y el enfoque abierto que ofrec��a internet. Empec�� a desarrollar aplicaciones de chat interactivas que usaban Telnet, una interfaz b��sica de teletipo. Internet no era popular hasta que apareci�� el lenguaje HTML y los navegadores, pero ya ve��a hacia d��nde iba��, nos cuenta. ��Ten��a sentido que las apuestas tambi��n se trasladaran a Internet��.
En ese momento, nadie m��s lo hac��a. Hubo algunos intentos que no dieron sus frutos, pero no hab��a ninguna apuesta real en l��nea. As�� que, naturalmente, Ian construy�� todo el sistema ��l mismo. Cuando finalmente lo puso en funcionamiento, el sistema Intertops fue uno de los primeros servidores web en usar una base de datos y p��ginas web juntas.
El 17 de enero de 1996, un cliente de Finlandia realiz�� la primera apuesta deportiva en l��nea de la historia: apost�� a que el Tottenham Hotspur le ganar��a al Hereford United. La apuesta era v��lida, Intertops perdi�� y la pag��.
��En aquella ��poca, nadie confiaba en internet, as�� que est��bamos convencidos de que nos iban a hackear. Imprimimos todas las apuestas en una impresora de matriz para tener copias f��sicas, as�� que cuando se hac��a la primera apuesta en l��nea, se pod��a o��r. As�� que todo fue bastante emocionante��.
La ampliaci��n, en las playas
A medida que Intertops crec��a, tambi��n lo hac��an sus ambiciones. ��Nos descubrieron unos abogados canadienses que le dijeron a Detlef que pod��an llevar la empresa al siguiente nivel��, explica Ian.
Result�� que ese nivel era Antigua.
Austria les hab��a otorgado una licencia de apuestas deportivas, pero un 바카라 en l��nea era impensable. Antigua, en cambio, ofrec��a licencias, una zona franca econ��mica, un acceso adecuado al sistema bancario y, tal vez, lo m��s importante, la libertad de seguir adelante.
��As�� que, con una oficina m��gicamente instalada por Simon Noble, nuestro jefe all��, y el gerente de oficina Ben Dalfen, nos instalamos. Fuimos los primeros en integrar un 바카라 Microgaming en una casa de apuestas deportivas, hasta donde yo s�� ��explica Ian��. Y, curiosamente, el 바카라 gener�� muchos m��s negocios que los deportes, algo que, francamente, no esper��bamos��.
En aquellos d��as era un 바카라 en el que se necesitaban hacer descargas: usabas tu cuenta, nombre de usuario y contrase?a para acceder a los juegos que descargabas para poder jugar.
��Microgaming: nos adoraban. Nosotros tambi��n. Incluso crearon un juego solo para nosotros, con nuestro propio dise?o y nuestra propia m��quina tragaperras��.
El cap��tulo de Antigua est�� marcado por el sol y por los contrastes. ��Iba durante varias semanas seguidas. Obviamente, era un lugar genial. Estaba abierto toda la noche, ?sabes? Hice muchos amigos. Pero tambi��n hab��a que instalar l��neas T1, gestionar ocho telefonistas y una batalla casi constante con el hardware.
��Compramos todos estos servidores Compaq de gama alta ��explica Ian��. Excepto que, m��s tarde, descubrimos que la garant��a de soporte global de Compaq se aplicaba en todo el mundo, excepto Antigua��.
��Un servidor en particular empez�� a apagarse solo sin previo aviso, colapsando la base de datos. As�� que cambi�� algunas piezas y llam�� a Compaq varias veces. Maldije. Cambi�� todo el servidor. Aun as��, fallaba; era un completo misterio. Simon finalmente dijo: ��No tiene sentido. O sea, has cambiado literalmente todo menos el enchufe��.
��Y bueno, eso fue todo, era solo el maldito enchufe. Fue un proceso de aprendizaje��.?
Ahora volamos
A finales de la d��cada del noventa, el mundo de las apuestas deportivas en l��nea estaba en pleno auge. Surg��an nuevos jugadores, algunos r��pidos, otros sospechosos. No obstante, Intertops ten��a la ventaja de ser pionero, un producto eficaz y una reputaci��n de pagar con creces.
Lanzaron nuevas versiones del sitio, a?adieron soporte multiling��e y agregaron actividades de 바카라 y p��quer. Experimentaron con clientes de apuestas en CD-ROM. Superaron los miles de obst��culos que conllevaba crear algo sin reglas.
Y a pesar de todo, Ian Sherrington permaneci�� detr��s del tel��n, construyendo, arreglando y mejorando.
Hoy en d��a, la industria de las apuestas en l��nea mueve millones y millones de d��lares. La idea de hacer una apuesta deportiva sin un smartphone es inimaginable. Empresas que ni siquiera exist��an en 1996 dominan ahora el mercado.
?Pero la primera apuesta? Ocurri�� en el sistema de Ian. En un sitio web que ��l cre��. Para un cliente al que nunca conoci��.
El legado y el ruido no tienen nada que ver
��No lo hicimos para vender�� explica��, simplemente lo hac��amos. A Detlef le fue bien, claro. Pero no se trataba de la salida, sino de resolver los problemas. Tampoco intent��bamos ser los primeros. Simplemente result�� as����.
Quiz��s eso es lo que distingue a Ian. Nunca busc�� la fama. Nunca se consider�� ni un fundador ni un disruptor. Simplemente ayud�� discretamente a inventar las apuestas deportivas en l��nea y luego se dedic�� a depurar el siguiente proyecto.
En una industria llena de bombo y platillo, Ian Sherrington lo logr�� todo antes de que nadie lo creyera posible, y lo hizo sin una sola charla TED. Sin una vuelta triunfal. Solo una revoluci��n lenta, deliberada y perfectamente sincronizada.
Ha pasado un tiempo desde que un Ian con cara fresca soldaba cables a una rueda de la fortuna alimentada por un timbre en aquella fiesta de la iglesia de los a?os setenta, pero el principio sigue siendo m��s o menos el mismo: construir algo, ver si funciona y tratar de no prender fuego a nada.?
Ah, y si alg��n alem��n te ofrece un cigarrillo, ac��ptalo, nunca se sabe a d��nde te puede llevar.
