España registra una caída del 55% de cuentas nuevas luego de las restricciones a la publicidad

Jillian Dingwall
Escrito por Jillian Dingwall
Traducido por Milagros Codo

La firme postura de las autoridades españolas sobre la publicidad de juegos de azar ha tenido un impacto tangible en el mercado. La cantidad de cuentas nuevas cayó un 55% entre 2020 y 2023, y los investigadores señalan el Real Decreto 958/2020 como el punto de inflexión. La ley restringió prácticamente todos los aspectos de la promoción de juegos de azar, desde los bonos hasta los anuncios en televisión.

A raíz de los cambios, que se implementaron entre finales de 2020 y mediados de 2021, se prohibieron los bonos de bienvenida, se redujeron los espacios publicitarios en televisión y radio a la madrugada y se eliminaron los patrocinios de famosos. Los patrocinios deportivos se eliminaron gradualmente después de la temporada de fútbol 2020-2021, mientras que plataformas como YouTube también eliminaron los anuncios de apuestas.

El gasto disminuye en todos los ámbitos

Como era de esperar, estas medidas provocaron una fuerte caída del gasto en marketing. Los operadores pasaron de gastar 193,7 millones de euros en marketing en 2020 a tan solo 116,5 millones dos años después, lo que supone una disminución del 39%. El gasto en bonificaciones también se vio afectado, pasando de 189,5 millones de euros en 2020 a 165,9 millones de euros en 2023. Los presupuestos de patrocinio prácticamente desaparecieron, pasando de 25,76 millones de euros a tan solo 2,67 millones de euros en ese mismo periodo.

En un basado en datos de España se analizó el impacto de la publicidad y el marketing de juegos de azar en el comportamiento del juego en línea y se descubrió que “la inversión en publicidad, promoción y patrocinio estaba significativamente relacionada con el aumento de la cantidad de cuentas nuevas y activas, así como con los depósitos y el dinero total apostado”.

Según un estudio publicado en la revista , la cantidad de cuentas nuevas disminuyó año tras año tras las restricciones publicitarias. La mayor caída se produjo en 2022, cuando los registros se redujeron un 35% hasta los 1,37 millones, una clara ruptura con el crecimiento constante que la industria había experimentado entre 2015 y 2020.

La Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ), el organismo regulador del juego en España, estimó que el Real Decreto redujo la cantidad de usuarios nuevos en alrededor de 263.000 solo en el segundo trimestre de 2021. Los investigadores tuvieron en cuenta los efectos de la pandemia para aislar el verdadero impacto de los cambios regulatorios.

Menos jugadores, pero mayor circulación de dinero

Incluso con menos jugadores nuevos, los clientes existentes mantuvieron el negocio en marcha. Los depósitos aumentaron de 2.190 millones de euros en 2020 a 3.180 millones de euros en 2023, a pesar de los estrictos límites a los depósitos diarios, semanales o mensuales. Las apuestas totales también ascendieron a 26.500 millones de euros en 2023, lo que sugiere que los usuarios existentes apostaban más, ya sea en frecuencia o en cantidad.

Dicho esto, los investigadores señalaron que si bien las cifras aumentaron, no cumplieron con los pronósticos anteriores de la industria, lo que implica que las reglas habían desacelerado efectivamente el impulso general del sector.

El gobierno ha seguido ajustando las reglas, incluida una medida para 2025 que limita las ofertas de adquisición a 100 euros y mantiene franjas horarias publicitarias estrictas.

La sentencia del tribunal pateó el tablero

La situación cambió de nuevo en 2024, cuando el Tribunal Supremo español falló parcialmente a favor de la Asociación Española de Juego Digital. Se anularon varias restricciones clave, como la prohibición de anuncios con famosos y algunas limitaciones al marketing dirigido a nuevos usuarios. Los anuncios de juegos de azar también regresaron a las plataformas de vídeo.

Ese cambio legal . Para el tercer trimestre de 2024, la inversión en marketing aumentó un 40,9% interanual —hasta los 131,7 millones de euros—, mientras que las nuevas cuentas mensuales aumentaron un 42,4%. La relación entre la libertad publicitaria y la captación de clientes era evidente.

En respuesta, el Ministerio de Consumo, dirigido por Pablo Bustinduy, comenzó a trabajar en una nueva legislación para restablecer normas más estrictas. Las nuevas propuestas se centran en gran medida en la protección de los jugadores, especialmente de entre 18 y 25 años. Las multas por infracciones graves pueden alcanzar ahora los 50 millones de euros.

Un acto de equilibrio regulatorio

La historia de España es una mirada reveladora a cómo las normas estrictas pueden frenar el crecimiento del juego, al menos temporalmente. También demuestra la rapidez con la que la industria puede recuperarse cuando se suavizan las restricciones. El reto ahora reside en encontrar un equilibrio entre la protección de los jugadores y la posibilidad de que los operadores gestionen negocios viables en un mercado cada vez más digital.

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