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La industria de los juegos de azar terrestres y virtuales se enfrenta a desafíos sin precedentes. El contexto actual exige respuestas rápidas, cooperación internacional y herramientas tecnológicas para garantizar la seguridad jurídica y la protección de los usuarios. Durante la 9.ª Cumbre Iberoamericana del Juego, celebrada en Lima, Perú, el presidente de Coljuegos, Marco Emilio Hincapié, presentó una propuesta transformadora: la creación de una Comisión Iberoamericana de Reguladores de juegos de suerte y azar.
La iniciativa busca agrupar a las autoridades reguladoras de más de diez países de Iberoamérica, entre ellos Bolivia, Perú, Ecuador, Brasil, España, Argentina, República Dominicana y Colombia. El objetivo central es claro: intercambiar experiencias y fortalecer la lucha contra la ilegalidad en el sector de los juegos de azar. Hincapié insistió en la necesidad de trabajar de manera conjunta para fortalecer la industria legal, compartir buenas prácticas y tomar decisiones coordinadas que beneficien a todos los actores del mercado.
La propuesta de la Comisión Iberoamericana de Reguladores de Juegos de Azar parte de la premisa de que la cooperación es la mejor herramienta para combatir el juego ilegal y proteger a los consumidores. Además, se busca establecer un marco mínimo de estandarización y facilitar el intercambio de información entre países, respetando siempre la soberanía normativa de cada uno.
La Comisión Iberoamericana de Reguladores de Juegos de Suerte y Azar se sostendría sobre cuatro pilares fundamentales.
1. Unificar criterios regulatorios, adaptando las mejores prácticas internacionales a las realidades locales y nacionales.
2. Promoción del juego responsable y la lucha contra la ilegalidad, dos aspectos que han cobrado especial relevancia con el incremento de las apuestas en línea y los juegos virtuales.
3. Regular nuevas modalidades, como los eSports y los juegos en línea, que han crecido de manera exponencial en los últimos años.
4. Compartir experiencias y brindar apoyo técnico a los países que inician sus procesos regulatorios, fomentando así el desarrollo de una industria más sólida y transparente en toda la región.
La propuesta será incluida en el memorando de entendimiento de la 9.ª Cumbre Iberoamericana del Juego, lo que garantiza su continuidad y la posibilidad de materializar acciones concretas en el corto plazo.
La cumbre también fue escenario para debatir sobre el impacto de la inteligencia artificial en el sector de los juegos de azar. Hincapié compartió las estrategias implementadas por Coljuegos para combatir los sitios web de apuestas ilegales, optimizar procesos internos y mejorar la eficiencia de la entidad.
El uso de inteligencia artificial permite detectar y bloquear operadores ilegales, monitorear actividades sospechosas y proteger la infraestructura tecnológica de los operadores legales. Estas herramientas son esenciales para garantizar la integridad del mercado, tanto en el ámbito presencial como en línea, y para proteger los datos de los usuarios.
La participación de Hincapié en paneles como “Situación actual y tendencias a corto plazo del juego en Latinoamérica” e “Impacto de la IA en el sector del juego” refleja el compromiso de Colombia con la innovación y la colaboración internacional. La postura de Coljuegos queda manifiesta: solo a través de la cooperación y la adopción de nuevas tecnologías será posible garantizar un sector de juegos de azar seguro, transparente y sostenible.
El sector de los juegos de azar presenciales y en línea vive un momento clave. La propuesta de la Comisión Iberoamericana de Reguladores marcaría un precedente en la historia de la industria en el continente americano. La cooperación internacional, la estandarización regulatoria y la adopción de tecnologías avanzadas son elementos indispensables para enfrentar los retos actuales y futuros.
La Cumbre de Lima puso de manifiesto que los reguladores y los operadores están dispuestos a trabajar juntos para fortalecer la industria legal, proteger a los jugadores y fomentar el desarrollo económico de la región. El camino está trazado: la unión de esfuerzos, la innovación tecnológica y el compromiso con la legalidad son las claves para construir una industria de juegos de azar más sólida y confiable en Iberoamérica.